miércoles, 10 de septiembre de 2014

Música sacra ¿Música popular?

Dedicado a mi amigo Jorge Enrique García, con el que tantas horas hemos echado hablando de éstos temas.

Hagamos un ejercicio de imaginación e intentemos convertirnos en un campesino español de hace....pongamos 300 años.

La vida del "Tercer Estamento", es decir, los "currantes", que ocupaban más del 70 % de la población (con variaciones dependiendo de la zona) era bastante sacrificada. No existían días libres, y sólo algunos días señalados en el calendario se consideraban festivos. Ésos días, sus miserables y grises vidas dedicadas al trabajo de sol a sol, tomaban color: Un día sin trabajar, con fiesta en la calle y en el templo.

Nunca me gustaron las etiquetas de "música culta", "música folclórica" y "música popular" que la mayoría de las editoriales muestran en los libros de Historia de la música para Secundaria; pero es cierto que había una "música culta", aquella que se producía y escuchaba en los palacios y en los ricos teatros de la alta burguesía que dicho sea de paso, aunque pertenecían a ese "70%", eran minoría frente a campesinos y artesanos:

Fragmento de la ópera "Il Sant´Alessio" (1631) de Stefano Landi

Motete politextual "Amara valde / Amour et biauté / Quant en moy" de Guillaume de Machaut (S.XIV)

Ésta música gozaba de un estatus superior ya que se dirigía a las clases dirigentes. Cultas y formadas. Óperas con libretos de alta calidad literaria que el pueblo llano no entendía debido obviamente a su falta de acceso a la educación.

Volvamos a nuestro campesino. Sin opción alguna de descubrir éste tipo de música, le quedaba la opción de entrar en la iglesia. 

Aunque la Iglesia católica ha sido el mejor mecenas de la música en círculos aristocráticos (el propio Machaut era clérigo), siempre puso sus ojos en la música como instrumento evangelizador. Así, todas las artes plásticas se ponían al servicio de la liturgia. La catequesis plástica para impresionar, cautivar e incluso atemorizar al fiel iletrado cada vez que entraba en el templo.

Así el estilo eclesiástico tenía un objetivo claro, no exento en algunos momentos de polémica en los cuales los defensores de la ortodoxia combatían las "intromisiones" de la música "culta" o del teatro, más sugerente y atrevida. En las iglesias orientales (como la ortodoxa rusa y griega por poner un par de ejemplos) la voz es el único instrumento permitido en el templo (incluso un único estilo de canto prácticamente inalterado a través de los siglos).

Nuestro campesino, tras trabajar horas y horas bajo el sol, de repente, podía escuchar cosas como ésta:


Motete "Surge propera amica" de Francisco Guerrero (finales del siglo XVI)

O ésta:

Motete "Ave verum corpus" de Wolfgang A. Mozart (finales del siglo XVIII)

....por poner un par de ejemplos.

Pongámonos en el pellejo de una persona cuya experiencia vital podría sufrir un "shock", pero yo personalmente opino que estas personas estarían habituadas, a fuerza de costumbre, a oír éste tipo de música, no exentos por supuesto de la fascinación que entraña escuchar producciones musicales elaboradas e interpretadas por profesionales altamente cualificados y que en muchos casos, tocan y estremecen al oyente, independientemente de su fe o ausencia de ella.

Así pues la "música sacra", desde éste punto de vista, se muestra como una música de fácil acceso al pueblo llano, una música "popular". Podremos escuchar millones de ejemplos, de mejor o peor calidad, pero está claro que para cualquier aficionado a la música "culta" o "clásica" poco iniciado, es altamente probable que sea la sacra la que ocupe la mayor parte de su discografía.

¿Qué opináis? 




miércoles, 11 de junio de 2014

Lykourgos Angelopoulos: El Canto bizantino

Λυκούργος Αγγελόπουλος (1941-2014) In Memoriam


Lykourgos Angelopoulos
Corría apresurado con unos buenos amigos amantes como yo de la buena música a la Catedral vieja de Cádiz. Era otoño de 2006 y cantaba el mítico Ensemble Organum

A medida que me acercaba a la antigua Seo por el Callejón de los Piratas, veía algunos señores que andaban (aunque no tan apresurados como yo) a tal magno evento, que suelo denominar el "Cometa Halley" de la Música Antigua en Cádiz (difícilmente veremos una cosa así otra vez). Estos tipos iban con sotanas blancas y uno de ellos, bastante mayor, iba hablando por teléfono móvil a medida que caminaba. Era un idioma extranjero que no había oído en mi vida, pero mis ganas de llegar a tiempo para no quedarme sin sitio podían más que mi frikismo por los idiomas.

Cuando llegamos a la Parroquia de Santa Cruz, no cabía un alfiler.
Parroquia de Santa Cruz, la "Catedral vieja" de Cádiz 

De pié, en una de las naves laterales de este relicario de historia estaba yo, con mis amigos. De la nave central emergen esos señores con los que me topé en el trayecto. Al frente su director, Marcel Péres.

El programa comparaba el canto mozárabe (buen tema para hablar en próximas entradas) con el marroquí de saama, desarrollados ambos en la mísma época y espacio físico: España. Podéis imaginar qué tal fue el concierto: Revelador, educativo, bello, catárquico...Impresionante.


Uno de los cantores era ése señor que hablaba por teléfono móvil en la lengua de Platón: Licurgo Angelopulos. El mayor investigador de canto bizantino, profesor y fundador del Coro griego de Canto bizantino, y cantor principal del Patriarcado ortodoxo de Constantinopla.

No recuerdo exactamente cuando empecé a escuchar canto bizantino, que a la Iglesia Ortodoxa lo que el gregoriano a la Católica. La primera diferencia que encontramos es que aquí no existe acompañamiento alguno (aunque muchos crean que el gregoriano es únicamente a capella, se ha interpretado con órgano desde prácticamente toda su existencia). La segunda, obviamente, el idioma. El griego es al rito ortodoxo lo que el latín al católico.

El resto de diferencias es pura conjetura ya que, al igual que en el gregoriano, la notación que aparece es muy tardía y por tanto la necesaria labor de investigadores como Angelopoulos tratando de atar cabos de cómo sonaba, cómo era.

En el caso que nos ocupa, él opta por la tradición, pero desde el punto de vista actual. En resumidas cuentas, el canto es liturgia y está vivo, no es una pieza de museo.

A los no habituados con éste tipo de músicas les llamará la atención el aire "oriental" de sus melodías, adornos sugerentes que no miran a Arabia, sino al Mediterráneo. 

Hace unas semanas uno de aquellos privilegiados que oímos cantar tropos en griego a aquél viejo en aquel concierto me dio la noticia de su muerte. Por eso, la experiencia que vivimos aquella tarde de noviembre de 2006 en nuestra querida ciudad, no se volverá a repetir.

Gracias maestro, mil gracias por tu obra que no es otra que mantener vivo tan rica herencia cultural. Descanse en paz.
Liturgia de San Juan Crisóstomo

Conferencia (en inglés) de Angelopoulos en EEUU.

Documental (en griego) sobre su Coro griego bizantino. Curioso verlos ensayar.

viernes, 18 de abril de 2014

Viernes Santo

Tarde de Viernes Santo.
Mezcla de silencio y nostalgia por la Semana Santa que está a punto de acabar. 

Compuesta como “Poema sinfónico en forma de marcha fúnebre” en 1919 y dedicada a la sevillana Virgen de la Amargura, Amarguras es considerada la "Gran marcha", el "Himno de la Semana Santa". Resumen perfecto del sentir único de los andaluces en esta época del año. Amarguras es Semana Santa, es Andalucía y es distancia y melancolía.


Amarguras. Manuel Font de Anta (1919)

domingo, 13 de abril de 2014

El llanto más amargo

The most bitter weep


¿Cómo poner música al llanto? 

Llorar es un acto humano complejo. Podemos llorar de risa, nostalgia, alegría, emoción... Al hablar de "llanto amargo", se nos viene a la mente el peor de todos. En el cual se mezclan tristeza, impotencia y arrepentimiento. ¿Acaso no hemos llorado alguna vez así cuando hemos sentido tanto impotencia como culpa?

How to put music to weeping?

Crying is a complex human act manifested in various ways: To laugh crying, cry for nostalgy, happiness, weep, wail... But when we talk about "bitter weeping", comes to mind the worst of all kinds in which sadness and contrition mixes. Who´s ever cried in that way when felt both grief and helplessness?

En esta escena de la Pasión según San Mateo, de J.S. Bach, Pedro niega al ser preguntado por su Maestro por tercera vez. Tras esto escucha el canto del gallo y, consciente de su cobardía, rompe a llorar amargamente. Él prometió dar su vida por Jesús y siente que definitivamente le traiciona y le deja morir.
Bach supo como nadie plasmar esa clase de llanto con extraordinaria belleza, haciéndonos sentir una empatía especial con Pedro.

In this scene from Bach´s Matthäus-Passion, Peter denies thrice when questioned about Jesus. After that, and aware of his cowardice, he began to weep bitterly. He promised to give his life defending his Master, and now feels like a treacherous man and leaving Jesus die.
Bach knew better than anyone how to translate these feelings to music with extraordinary beauty, making us to empathize with Peter.

Comienza la Semana Santa, y lo hacemos con este momento de la Pasión que se lee cada Domingo de Ramos. Sólo oye, piensa...y llora.

Easter begins today, and starts with this unique moment from Palm Sunday´s Passion. Just hear, think... and weep.

Ten piedad de mí, Dios mío, advierte mi llanto.
Mira mi corazón y mis ojos que lloran amargamente ante Ti. ¡Ten piedad de mí!
Erbarme dich, mein Gott,
Um meiner Zähren willen; Schaue hier, Herz und Auge Weint vor dir bitterlich. Erbarme dich!
Have mercy, my God,
for the sake of my tears!
Look here, heart and eyes
weep bitterly before You.
Have mercy, have mercy!




Versión de la mezzo checa /Magdalena Kožená/ czech mezzo sings.